SuPerman ebrioEstaba un señor en una cantina tomando muy feliz cuando en eso se le acerca un ebrio y le dice balbuceando: Le apuesto 100 pesos a que puedo golpearme la cabeza con una cerveza de vidrio sin que me pase nada. El hombre intrigado aceptó la apuesta y se sorprendió al ver al ebrio cumplir la apuesta sin siquiera hacer algún gesto de dolor. Luego le dijo el ebrio otra vez: Le apuesto 200 pesos a que puedo saltar por la ventana sin que me pase nada. El señor aceptó y vio al hombre saltar por la ventana y regresar intacto a la barra de la cantina. El hombre pagó las apuestas y se disponía a seguir apostando con el ebrio cuando el cantinero los interrumpió y le dijo al señor: Ya no le hagas caso a superman, ¡Siempre que se pone borracho y se le acaba el dinero le da por apostar! |